Todas las bolsas mundiales y especialmente la china, han registrado importantes caídas que han reducido el valor de mercado de las grandes empresas.
Retrasos en la producción de tecnología
China es el mayor productor mundial de dispositivos electrónicos y en sus plantas se fabrican miles de productos de todo tipo y para todas las grandes tecnológicas.
Las cuarentenas han impedido a los empleados el acceso a los puestos de trabajo y fábricas y empresas han tenido que cerrar o mantienen un nivel bajo de producción.
El coronavirus o ahora llamado COVID-19, está teniendo impacto en la economía y en la industria tecnológica. Su impacto final en cuanto a retrasos en lanzamientos o aumentos de precios dependerá finalmente de la propagación del virus.
Para América Latina, que viene creciendo menos desde hace cinco años y se estancó en 2019, Chile y Perú, países altamente dependientes de sus ventas de cobre, ya sufren porque desde que se disparó la epidemia en la tercera semana de enero el precio del metal perdió un 10%.
Gigantes tecnológicos como Samsung, Foxconn o Apple se ven obligados a cerrar temporalmente en China fábricas, oficinas y tiendas.
Se ha visto una escasez en varios de los productos que utiliza la empresa para la fabricación de sus productos, y espera que la situación mejore en los próximos días.
Pero sin duda algunos analistas ya vaticinan un mal tiempo para los gigantes, en especial para la venta de celulares en el mundo. Según medios internacionales, algunos de ellos pronostican que las principales marcas chinas reducirán sus envíos en el mundo hasta en un 5%. Vale la pena recordar que China produce siete de cada diez smartphones que funcionan en el mundo, por lo que los expertos prevén que, si la situación continúa agravándose, la producción de celulares podría trasladarse a otros mercados.
Las compañías de informática, electrónica de consumo y telecomunicaciones siguen con preocupación el avance de la epidemia en el país asiático.
Los que saldrían más perjudicados serían quienes «fabrican y ensamblan componentes» como móviles u ordenadores.
«El impacto dependerá del tiempo que se prolongue la situación. En general, se suele trabajar con un stock suficiente que permita satisfacer la demanda, pero si la situación se alarga puede llegar a afectar al suministro de componentes de todo tipo.
El efecto más inmediato y visible podría ser el aumento de costes por la escasez de suministro».
Una alta posibilidad de que los precios de televisores y de monitores suban en Estados Unidos y en el resto del mundo podría darse en los próximos meses.
También resultaría afectado la industria de la construcción de paneles LCD, ya que cinco fábricas en la zona de Wuhan están cerrando por la pandemia, lo que obligaría a subir los precios del costo.
Industria en China, bajaría el 10% la producción total del país y hasta llegar a un crítico 20% durante el mes de febrero.
esto causaría un aumento en los precios de televisores y monitores para computadoras.
China comprende casi el 55% de los paneles LCD que se exportan al resto de los países del mundo en 2020.
